Huile Fondamentale Biologique Recherche

Aceite de tsubaki (camelia japonesa): Agentes regenerantes y reparadores

Extremadamente rico en omega 9, ácidos grasos considerados un antiinflamatorio natural, aceleran la recuperación de la piel inflamada e intervienen en los procesos de cicatrización, preservando así la función barrera de la piel. Mejora la elasticidad de los tejidos y mantiene el grado óptimo de hidratación, reacondicionando la epidermis. Ideal para pieles secas, sensibles e irritadas o maduras, así como para cabellos secos, opacos o quebradizos.

Aceite de sacha inchi: Agentes regenerantes y reparadores

Es la fuente vegetal más rica en ácidos grasos insaturados. Se extrae de los granos mediante el método de primera presión en frío. Altamente concentrado en tocoferol (Vitamina E), actúa como antioxidante, reestructura, repara y protege la piel fortaleciendo su barrera de protección natural y limitando su deshidratación. Deja la piel suave, sin sensación grasa y con una barrera cutánea fortalecida.

Extracto de jojoba: Agentes regenerantes y reparadores

Su notable eficacia se debe a los alcoholes grasos (C20-24), obtenidos por hidrólisis de la cera. Esta composición le confiere así un fuerte poder de penetración, favoreciendo la regeneración epidérmica, sin dejar una película grasa.

Aceite de semillas de sándalo: Agentes regenerantes y reparadores

Ejerce una intensa acción reparadora. Mejora además las estructuras de la dermis, potenciando la elasticidad y tonicidad de la piel. También resulta beneficioso para el fortalecimiento de los cabellos frágiles y quebradizos, ya que favorece el aporte de oxígeno al folículo piloso y estimula la irrigación sanguínea, favoreciendo el transporte de nutrientes al bulbo capilar.

Aceite de macadamia: Agentes protectores

Tiene propiedades reestructurantes, hidratantes, nutritivas y suavizantes. Puede ser aplicado sobre pieles frágiles en los tratamientos de estrías, grietas y cicatrices. Muy fluido, penetra inmediatamente en la piel sin dejar film graso.

Extracto oleoso de salicornia: Agentes protectores

Sus agentes protectores tienen la particularidad de estimular la expresión de acuaporinas 3 y 8 (canales de membrana que transportan agua a través del cuerpo humano), en la epidermis, para actuar en todos los frentes de sequedad cutánea. Actúan también sobre los NMF (factores de hidratación natural) y PIA (pérdida insensible de agua), manteniendo el grado óptimo de hidratación, y reforzando la protección frente a las agresiones externas.

Extracto de alga wakame: Agentes protectores

Rico en fucosterol (fitoesterol), protege contra el fotoenvejecimiento y reduce la fotosensibilidad, gracias a su intensa capacidad antioxidante, antiinflamatoria y protectora de la función barrera. Reconstituye el film hidrolipídico, y favorece la síntesis de lípidos epidérmicos, participando en la reparación de la capa córnea. Mejora además las reservas hídricas de la dermis y refuerza la epidermis, para evitar la pérdida transepidérmica de agua. Aporta elasticidad y confort a las pieles más secas y deshidratadas

Aceite de algodón: Agentes hidratantes

Su aceite  contiene ceramidas, lípidos que reducen la pérdida insensible de agua. Éstas forman una barrera protectora que ayuda a reforzar la capa hidrolipídica. Su uso mejora la textura de la piel, revitalizándola y revirtiendo así muchos signos propios de la edad, como sequedad, fragilidad o deshidratación. Es el aceite ideal para las pieles secas y fragilizadas.

Aceite de salvado de arroz: Agentes hidratantes

Su riqueza en vitamina E, fitoesteroles y ácido ferúlico, le aporta una extraordinaria acción hidratante y antioxidante. Muy fluido, se absorbe rápidamente y ofrece confort inmediato. Por su alto contenido en fitoesteroles y ácidos grasos esenciales (omega 3 y 6), ayuda a prevenir el envejecimiento cutáneo, luchando contra los radicales libres.

Extracto de oliva: Agentes hidratantes

Este extracto se obtiene del fruto y las hojas del olivo, reconocido por sus propiedades altamente nutritivas, suavizantes y restauradoras. Su riqueza en ácidos grasos esenciales (omega 3, 6 y 9), proporciona hidratación, repara y regenera la barrera cutánea. Combina dos antioxidantes naturales, los polifenoles y los tocoferoles, ampliamente conocidos por su lucha frente a los radicales libres, que previenen los signos de envejecimiento. Corrige la sequedad de la piel y refuerza el cabello, evitando su fragilidad y rotura.

Extracto oleoso de romero: Agente antioxidante

Considerado desde la antigüedad como una planta con virtudes beneficiosas y curativas, su extracto oleoso se obtiene de la maceración de las hojas del romero. Potente antioxidante, protege frente al estrés oxidativo, y limita los efectos degenerativos del sol y la contaminación.